En el siguiente gráfico se puede
observar la evolución de la tasa de paro en nuestro país desde el año 1990. Hay
que destacar que el año en que hubo más parados en España fue en el 2013,
alcanzando un 25,77 %.
Este número tan elevado de parados
tiene consecuencias negativas en todos los ámbitos de la sociedad actual y como
no en la educación. En mi opinión, el paro influye de forma considerable en la
educación por muchos motivos. Al haber un mayor número de desempleados, el
Gobierno recauda menos impuestos, por lo que se destinan menos presupuestos a
otros sectores entre los que se encuentra la educación. El número de profesores
que hay en los colegios también se ha visto afectado, ya que cada vez cuentan
con un menor número de docentes provocando así la existencia de agrupaciones
mayores de niños y adaptaciones de los horarios dependiendo de los profesores
que haya. Además, al bajar el número de profesores, también se reducen los
profesores de refuerzo y apoyo, por lo que los demás tienen mucho más trabajo,
produciéndose así un estrés y una sobrecarga mayor. Por lo tanto, la educación
que reciben los alumnos se ve afectada de forma negativa, ya que al haber mayor
número de niños por clase, la atención que recibe cada uno de ellos es menos
individualizada y aquellos que necesitan un refuerzo complementario no lo van a
poder recibir. Por último, hay que desatacar que el paro en las familias también
tiene graves consecuencias pues en numerosas ocasiones no pueden hacer frente a
los gastos que suponen la educación de sus hijos. Pueden tener dificultades
para comprar los libros de texto, material escolar o incluso para pagar a sus
hijos las actividades extraescolares y complementarias. Además, las becas de
ayuda se han visto reducidas a la mitad.
El paro es un problema que afecta
gravemente a la educación y por lo tanto es necesario que salgamos de esa
situación. Por lo que he visto en las noticias, el paro ha disminuido en los
últimos meses, pero creo que todavía no es suficiente y queda mucho trabajo por
hacer. La sanidad y la educación son los pilares fundamentales del estado de
bienestar español, por lo que no se deberían ver afectados. Es necesario que
entre todos fomentemos el crecimiento del empleo para poder conseguir una plena
recuperación económica. Si la educación no se cuida ni se mima, en un futuro
eso tendrá repercusiones para la sociedad y nos afectará todos por igual. Para
que un país sea grande es necesario fomentar la educación y combatir la
ignorancia.
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